Col·labora per donar atenció psicològica, social i jurídica a víctimes d'abús sexual infantil en situació d'exclusió social
Una campaña de
30
Beneficiarios directos
Aquellas personas que de forma natural han sido beneficiadas por las acciones desarrolladas en la campaña.
90
Beneficiarios indirectos
Aquellas personas identificables que reciben un efecto potencial de las acciones desarrolladas en la campaña.
La Fundación Vicki Bernadet tiene como objetivo general, la prevención de la violencia sexual y el abuso sexual infantil, la ayuda y defensa de las personas afectadas por este problema y la de sus familias, así como, el fomentar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.
El único estudio de prevalencia entorno al abuso sexual infantil obtenido con datos recogidos en España, es el liderado por Félix López, Universidad de Salamanca, 1994. Los resultados del Estudio objetivan que un 18,9% de la población manifestó haber padecido abuso sexual en algún momento de su infancia. Este porcentaje, aunque algo mayor en mujeres (22,5%), es también muy alto en hombres (15,2%). El abuso sexual infantil, es en la mayoría de los casos, una experiencia traumática, que interfiere en el adecuado desarrollo de la víctima y repercute negativamente en su estado físico y psicológico. Las consecuencias psicológicas que suelen acompañar al abuso sexual infantil, son frecuentes y diversas y afectan a la víctima durante su infancia, perdurando dicha afectación, en la mayoría de los casos, hasta su edad adulta. Dicha afectación no solo repercute en víctimas y familiares, si no en el conjunto de la sociedad. Como se ha señalado, las secuelas de este trauma se arrastran generalmente hasta la edad adulta, siendo frecuente encontrar en el ámbito de Salud Mental, a pacientes que padecieron abusos sexuales durante su infancia y que presentan secuelas relevantes directamente relacionadas con dicho trauma, tales como, depresión, ansiedad, baja autoestima, sentimiento de culpa y vergüenza, estigmatización, trastorno límite de la personalidad, sentimiento de abandono, dificultad en las relaciones interpersonales, aislamiento, disociación, dificultades durante la maternidad y paternidad, consumo de substancias tóxicas, fobias, prostitución, problemas entorno a la sexualidad, dolores crónicos, etc. La intervención especializada resulta fundamental para abordar y reparar el trauma.
Desde el inicio del proyecto troncal (1997) Vicki Bernadet ha trabajado en una metodología que se define por la atención integral, prevención y sensibilización de los abusos sexuales a menores cometidos en el ámbito familiar y en el entorno de confianza del niño o niña. De media la Fundación recibe unas 1.000 demandas anuales de asistencia y 10.000 demandas anuales de formación a profesionales y familias, siendo un referente para la administración autonómica y nacional.
Vicky Bernadet ha podido analizar los colectivos más necesitados, los perfiles concretos que se definen por ser los más excluidos ante la posibilidad de acceder a una recuperación a través del proceso terapéutico que ofrece la Fundación, y por tanto, más necesitados de ayuda. A través de este programa, por lo tanto, se asume la atención a colectivos vulnerables con gran capacidad de repercusión.
Los Servicios que se ofrecen a través de este proyecto permitirán una atención integral a las víctimas, desde una concepción holística de las personas, que facilita no solo su recuperación, si no también su empoderamiento y la adquisición de recursos de auto-protección, refuerzo y creación de redes de soporte. La complejidad de la intervención requiere un abordaje interdisciplinar e interdepartamental. Cuentan con un equipo que responde a esta necesidad que incluye profesionales del ámbito del trabajo social, psicológico y jurídico, todos ellos especializados en esta problemática. Se trabaja en una línea común cohesionada a través de encuentros de equipo semanales donde se trabaja la evaluación conjunta de los casos y el consenso transversal. Semanalmente y en las reuniones de equipo, el profesional referente de cada caso realiza conjuntamente con la trabajadora social y el resto del equipo terapéutico, un trabajo de discusión, puesta en común y evaluación conjunta de cada caso, supervisados por la coordinadora del servicio. Aquellos posibles casos que planteen una complejidad de manejo son evaluados en sesiones de supervisión externa.
Ofrecer un espacio terapéutico y psico-social, orientación a lo largo de proceso judicial y información y asesoramiento especializado, a personas en situación de pobreza o exclusión social, afectadas por abuso sexual durante su infancia y a sus familiares.
Infantes y jóvenes en riesgo de exclusión social víctimas de abuso sexual infantil.