- Mejorar la calidad de vida y hacer posible la inserción social de las mujeres que han sido víctimas de violencia machista.
- Sensibilizar la sociedad sobre la igualdad de género y la violencia hacia las mujeres, así como dar respuesta a los efectos que provoca la violencia machista, la desigualdad de género y/o social en las mujeres y las hijas e hijos a cargo.
La violencia machista es aquella que se ejerce hacia las mujeres, las jóvenes y las niñas que está caracterizada por el alcance de su prevalencia, la gravedad de las consecuencias y que implica una grave vulneración de los derechos humanos. Solo hasta septiembre de 2021 se registraron 10.201 denuncias por violencia machista en el ámbito pareja y 2.459 en el ámbito familiar, según el Instituto Catalán de las Mujeres.
Muy a menudo la violencia machista comporta la necesidad de acceder a un recurso residencial debido, principalmente, a los siguientes factores:
- Necesidad de protección y seguridad: las mujeres y sus hijas e hijos que sufren y han sufrido violencia machista a menudo tienen que marchar de su propio hogar familiar porque no es segura por su integridad física, psicológica y emocional.
- Necesidad de disponer de apoyo profesional: a menudo tienen un grado de afectación que requiere de apoyo profesional especializado para poder recuperar la estabilidad, la salud y la autonomía necesarias para continuar con su propia vida.
- Necesidad de compensar factores de desigualdad: hay que revertir una situación de desigualdad que empieza por el solo hecho de ser mujeres (y en el caso de los niños, depender de una mujer) y vivir en un contexto en que la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres es desigual.
- Dar acogida temporal y un espacio de protección a mujeres solas o acompañadas de sus hijas e hijos y que han vivido situaciones y relaciones de violencia machista.
- Ofrecer apoyo y orientación profesional para la vida autónoma. Promover la autonomía, la responsabilidad y el empoderamiento de la mujer de forma que sea artífice de sus cambios y toma de decisiones.
- Atender las necesidades de sus hijas e hijos. Fortalecer las relaciones entre las madres y sus hijos e hijas en el nuevo contexto familiar.
- Facilitar la coordinación y el trabajo en red con los servicios implicados en la atención y seguimiento de las mujeres y menores.
Mujeres solas o con hijas e hijos que sufren violencia machista y han tenido que salir de su domicilio y requieren un espacio de seguridad, contención emocional o acompañamiento y orientación profesional.
Associación LligamDona (web)
